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DECLARACIÓN PÚBLICA

Como integrantes de una organización dedicada a pensar, investigar y formar en torno a lo grupal e institucional, nos parece imprescindible exponer nuestra preocupación y rechazo frente al asesinato del comunero Mapuche Camilo Catrillanca Marín, en manos del llamado Comando Jungla ocurrido el miércoles 14 de noviembre de 2018.

Nos pronunciamos frente a la sistemática estrategia de tergiversación de la información, por la permanente impunidad en el ejercicio de la violencia por parte del Estado, especialmente de las fuerzas policiales, en donde se reprime la expresión de la diferencia y todo aquello que no vaya en la línea del modelo neoliberal imperante.

Las medidas de militarización, como lo constituye el actual escenario del sur de Chile, a través de diversas decisiones del Estado de Chile, en este caso el gobierno de turno de Sebastián Piñera, así como la implementación de programas como el Plan Impulso Araucanía, de escasa o nula participación ciudadana, se encuentran en contra de Convenios internacionales; no existe evidencia en el mundo que avale o respalde intervenciones de este tipo, más bien lo que se ha observado es que generan una agudización de los conflictos sociales, con resultados nefastos para la sociedad en su conjunto.

Consideramos que el actual panorama nacional, donde se exacerba el lugar del mercado de los distintos sectores productivos, sitúa la posibilidad de convivencia y construcción colectiva en serio riesgo. La historia de nuestros pueblos ha estado marcada por masacres a la población por parte del Estado, que opera defendiendo y resguardando los intereses de los sectores con el  poder económico, que, aunque minoría, definen la historia oficial; por lo cual estas historias han sido negadas sistemáticamente por dicho discurso. Hoy los medios de comunicación, el Congreso y los distintos organismos estatales se encuentran cooptados por esta minoría, lo que se refleja en un creciente deterioro de distintos

aspectos de la vida; y en particular en un empobrecimiento de la salud mental y de la capacidad de construcción colectiva.

Frente a ello, llamamos a todos aquellos que se sienten identificados con estos planteamientos a realizar un trabajo educativo con quienes están en su entorno, priorizando informar y explicar aquello que desde el discurso oficial se calla o tergiversa.

Nos ponemos a disposición para generar en conjunto espacios de discusión, en donde poder accionar un pensamiento crítico, implicado con la defensa de la diferencia y de una mayor justicia y equidad social.

Livia Sepúlveda, Carolina Lillo, Cristian Idiáquez

Equipo Escuela

Santiago, 20 de noviembre de 2018.